La utilidad de la Due Diligence

La Due Diligence es el proceso de asegurarse de que las cosas son tal como parecen, antes de sellar un acuerdo. Para alguien que está considerando una fusión o la compra de un negocio ya existente, la revisión de la documentación y las respuestas a sus preguntas las puede obtenre con la Due Diligence.

No hay duda de que es un proceso complejo que puede llevar mucho tiempo. Pero para cualquier fusión o adquisición, mejor tomar la decisión con toda la información.

Durante el proceso de Due Diligence, una lista de documentos deben ser suministrados. La lista de documentos deben cubrir una gama de áreas, incluyendo:

Estructura jurídica y constitución de la sociedad
Servicio de Rentas Internas
Seguro de la información política
Estructura organizativa
Personal de las políticas
Operaciones
El capital y bienes raíces
Los contratos, licencias, convenios y afiliaciones
Tecnología y Propiedad Intelectual
Pasivo circulante o potencial jurídica
Materiales de mercadeo

Hoy más que nunca, los compradores están poniendo más énfasis en el proceso de Due Diligence. Y mientras que el aspecto financiero es un componente clave, el proceso de Due Diligence debe también considerar los elementos de la organización. Asegúrese de buscar la documentación y hacer preguntas importantes sobre la cultura de la compañía, la estrategia, el liderazgo y las competencias.

Para tratar adecuadamente y evaluar todas las áreas del proceso de due diligence, lo mejor es contar con un buen equipo de personas. Trabajar con el equipo, incluyendo su intermediación comercial, durante todo el proceso para revisar y evaluar los documentos y la información que recibe. También es importante mantener una mente abierta. Asegúrese de que usted obtenga toda la información que necesita, pero no piense que usted encontrará algo mal.

Aunque el proceso de Due Diligence puede llevar un tiempo considerable, es una parte crítica de cualquier transacción y debe ser considerado como el fundamento de todo el asunto.