Tiempos dífíciles: ideas nuevas

En situaciones de bonanza económica te puedes permitir el lujo de seguir con una cierta inercia de ideas, pero cuando llegan tiempos difíciles y el mercado se contrae, innovar y generar nuevas ideas se convierte en una necesidad. Veremos cómo funciona el proceso creativo, y trataremos algunas técnicas de creatividad y de generación de ideas.
El proceso creativo
Se trata en definitiva de identificar vías alternativas. Para ello es necesario producir un cambio innovador, un cambio creativo y para mejorar. Es importante destacar que creatividad no es lo mismo que innovación. Según Simón Majaro –reconocido especialista en managment, marketing- la creatividad es “el proceso mental que nos ayuda a generar ideas” y la innovación es “la aplicación práctica de tales ideas con el propósito de alcanzar los objetivos de la organización de manera eficaz”.

¿Cómo se crea una nueva idea?
El único secreto o truco de la creatividad es el siguiente: Siempre, una idea aparentemente nueva y completamente original no es más que la unión de dos o más ideas o conceptos que existían antes.

Nada surge de la nada, y podemos encontrar multitud de ejemplos a lo largo de nuestra historia de cómo se produjo un invento a partir de elementos que ya existían con anterioridad:
• Cocinar = fuego + comida.
• Automóvil = carruaje de caballos + motor de combustión interna.
• Imprenta = prensa de vino + máquina de acuñación.
• Reloj despertador = reloj + alarma.
• Avión = antiguos planeadores + motor.
• Teléfono = Diafragma vibratorio + bobina + electricidad.

Haremos un breve resumen a continuación de algunas de las técnicas creativas más utilizadas.

Seis sombreros para pensar
Esta técnica ideada por Edward De Bono se basa en que se puede aprender a aplicar el pensamiento creativo lo mismo que se aprende cualquier habilidad. Para conseguirlo hay que racionalizar la confusión que caracteriza al pensamiento, en que la creatividad, la lógica, la información o la esperanza se solapan y nos agobian. De alguna manera los sombreros racionalizan y secuencian esta confusión. También establecen una intencionalidad de pensar, y de acuerdo con De Bono, es esa intención, unida a los movimientos que realicemos para alcanzarla la que convertirán una idea en realidad.
El objetivo de esta técnica es analizar, de forma sucesiva, el asunto desde diferentes ángulos de pensamiento utilizando los diferentes “sombreros”, uno tras otro, que representan:
Sombrero blanco: Hechos puros, números, información fría y objetiva. “Soy un ordenador que da los hechos y las cifras que me piden... y punto.”
Sombrero rojo: Emociones y sentimientos, presentimiento e intuición. “Así me siento respecto a este asunto, siento, intuyo que...”
Sombrero negro: Enjuiciamiento negativo, abogado del diablo, razón por la que no resultará. “Aquí veo los siguientes riesgos y peligros; creo que no va funcionar por las siguientes razones...”
Sombrero amarillo: Brillo y optimismo, luz del sol, positivo, constructivo, oportunidad. “Hay que ser positivo y constructivo; hay que soñar, tener una visión, vivir de esperanzas...”
Sombrero verde: Fertilidad, creatividad, plantas brotando de las semillas, movimiento, provocación. “Es necesario buscar nuevas alternativa; debemos ir más allá de lo conocido, de lo obvio y de lo satisfactorio.”
Sombrero azul: Moderación, control, director de orquesta, pensar en el pensamiento. “Lo primero es definir los asuntos hacia los que debemos dirigir el pensamiento; hay que establecer el foco, definir los problemas y plantear las preguntas básicas. Debemos hacer una síntesis de todos los demás ‘sombreros’, tener una visión global, definir las conclusiones.”

El pensamiento lateral
El término pensamiento lateral (lateral thinking) fue propuesto por Edward De Bono para representar todos esos caminos alternativos que no estamos acostumbrados a tomar a la hora de encontrar soluciones a un problema.
Según De Bono la mayoría de la gente tiende a enfocarse en una sola forma de resolver un conflicto. Esto ocurre fundamentalmente porque las otras vías para resolverlo no son visibles a simple vista. Algunas premisas para utilizar esta técnica son:
- Hay que atreverse a cambiar.
- Es necesario aplicar ideas diferentes para lograr resultados diferentes.
- La solución no es hacerlo mejor, sino hacerlo diferente.
- Es necesario re-imaginar para crear.
El pensamiento lateral rompe la lógica del pensamiento vertical. El pensamiento vertical crea patrones y adapta las novedades a lo que conocemos (todo se limita a seguir haciendo lo mismo que hemos hecho hasta ahora). El pensamiento lateral nos permite encontrar nuevos caminos que antes no habíamos visto.
El pensamiento vertical se caracteriza por: Se mueve sólo si hay una dirección en qué moverse. Sabe lo que está buscando. Es analítico. Se basa en la secuencia de las ideas. Es un proceso finito. A nivel metodologico en el pensamiento vertical Se usa la negación para bloquear bifurcaciones y alternativas
Se excluye aquello que parece que no está relacionado con el tema. Las categorías, clasificaciones y etiquetas son fijas. Se siguen los caminos más evidentes.

Como método o enfoque para interrumpir el pensamiento lógico vertical, ante cada situación bajo análisis, plantearse las siguientes alternativas:
Sustiutirla: ¿Qué podemos hacer en lugar de...?
Invertirla: ¿Y si lo hacemos de manera contraria a lo usual?
Combinarla: ¿Con qué podemos unir este asunto para que sea más eficaz?
Exagerarla: ¿Hasta dónde podemos llegar con esto?
Eliminarla: ¿Y qué pasa si no lo hacemos del todo?
Reordenarla: ¿Qué sucedería si alteramos la secuencia tradicional?

La óptica de la re-ingeniería
Se trata de aplicar en el proceso creativo los métodos de trabajo de la re-ingeniería. Al aplicar la re-ingeniería no se da nada por sentado y sabido: todo queda sujeto a discusión para ser confirmado (todo).
Las dos preguntas con que se inicia a aplicar la re-ingeniería son: ¿Por qué hacemos lo que estamos haciendo? (Nada se da como válido y definitivo.) ¿Y por qué lo hacemos de esta forma?
En la re-ingeniería se comienza a trabajar con una hoja en blanco (hay que olvidarse de todo lo existente, todo puede estar equivocado). En resumen, en la re-ingeniería no se trata de mejorar lo existente, se trata de crear algo completamente nuevo, mejor, con mayor capacidad para alcanzar el objetivo deseado.

Conclusiones
Dice el refrán que la necesidad agudiza el ingenio. Utilicemos las técnicas creativas existentes para facilitar esta labor, teniendo en cuenta algunas ideas clave que no se deben olvidar:
- Hay que liberar la imaginación, dejarla correr sin límites ni cortapisas.
- No hay que criticar ni coartar las ideas de los otros (una idea absurda puede ser el germen de una idea muy eficaz).
- Toda idea creativa implica la destrucción de algo: hay que actuar sin miedo a alterar lo establecido.
- Siempre se puede tener otra idea, probablemente mejor (no hay que conformarse con la primera idea que le venga a la mente).
- A nadie se le critica nunca por tener muchas ideas.
- Tener una nueva idea produce un gran placer y refuerza la autoestima.
- No pongas límites donde no los hay.